Si estás pensando en elegir una actividad para ejercitarte que sea divertida y llena de beneficios, quizá deberías probar la natación.
Nadar es una muy buena opción, ya que además de ser un ejercicio muy completo, en donde absolutamente todos los músculos entran en acción, ayuda a activar procesos cerebrales relacionados con el manejo del espacio, la precisión de los movimientos y la coordinación de acciones múltiples.
No importa el estilo de nado que elijas, los beneficios se sentirán de cualquier forma.
Pero si aún tienes dudas, aquí te menciono algunas razones que seguramente lograrán que te enamores de este noble deporte:
Beneficios para tu cuerpo
Existen muchos deportes que son buenos para tu salud; sin embargo, la natación puede brindarte varios beneficios específicos, entre los que podemos mencionar:
- Tonifica la musculatura de piernas, brazos y espalda.
- Olvídate de la joroba, la natación, sin duda, ayuda a corregir tu postura corporal.
- Es un ejercicio que, definitivamente, incrementa la flexibilidad.
- La posición horizontal en el agua facilita el movimiento de secreciones pulmonares, mejorando así la respiración.
Retrasa el envejecimiento
La práctica de la natación mejora la calidad de vida debido al retraso de los efectos del envejecimiento, al incremento de la capacidad motriz y de la memoria que trae consigo, ya que se requiere de mucha coordinación y concentración durante su ejecución.
Cuida tus articulaciones
La natación es una actividad de muy bajo impacto debido a que el agua contrarresta la fuerza de gravedad. Por lo anterior, al practicar este deporte hay poca tensión, tanto en huesos como en articulaciones. Recuerda que en el agua pesamos menos y nuestros músculos se relajan. Es un deporte muy seguro.
Reduce el estrés y ayuda a tu salud mental
Al igual que otros deportes, la natación te hace liberar endorfinas, las cuales aumentan la sensación de bienestar.
Se ha demostrado que el contacto del cuerpo con el agua se asocia a diversión, por lo que, en automático, es una actividad que ayuda a reducir el estrés. Los movimientos rítmicos y sonoros del agua hacen que nadar sea una experiencia muy relajante. Al ser un deporte en el que las distracciones son pocas, se presta también a la meditación, pues permite que te concentres únicamente en tu respiración y movimientos. Además ayuda a aumentar el autoestima y disminuir algunos complejos; su práctica conlleva el conocer gente y ampliar el círculo de amigos.
Es un deporte para todo el mundo
Este es uno de lo puntos más favorecedores del deporte de nadar, ya que lo puede practicar cualquier persona, no importando su edad y su condición: desde un bebé o una mujer embarazada, hasta una persona que padezca escoliosis (o cualquier problema de espalda); solo es importante elegir el estilo que mejor se adapte a las necesidades de la persona, pero es un hecho que todos pueden lanzar a la alberca para ejercitarse.
Ayuda a perder peso
Este ejercicio te ayuda a quemar calorías; si realizas una rutina que dure veinte minutos continuos por lo menos, manteniendo un ritmo y velocidad constantes, puede ser un excelente ejercicio aeróbico que mejorará tu forma física, estimulando a la vez tu metabolismo y logrando quemar grasa.
Estas son solo algunas de las razones por las que quizá deberías darle una oportunidad a la natación. Segura estoy de que después de probarla no querrás dejarla. ¡Anda, date un chapuzón! Ya viste lo saludable que puede resultar.
Recuerda… ¡tú generas el cambio!