Tegucigalpa, Honduras.
El presidente del Tribunal Superior de Cuentas (TSC), Miguel Mejía, informó que de 27 expedientes de policías que fueron analizados, ya tiene cinco documentos listos con indicios de actos de enriquecimiento ilícito de agentes policiales que podrían ser removidos de sus cargos.
La información surgió debido a la nueva Ley de Depuración policial aprobada recientemente en el Congreso Nacional.
Entre las facultades que la nueva ley le otorga al gobierno, está la separación de los uniformados, sin caer en responsabilidades penales.
Los siete artículos –del decreto- contemplan aspectos claves para que el proceso de depuración sea verdadera.
Mejía explicó que una vez culminada la investigación se procede a notificarles a los uniformados para que estos se defiendan conforme a ley.
Los policías deben interponer los recursos legales, mecanismo que tiene una duración de dos a tres meses, para que luego sean conocidos por el Ministerio Público, expreso el funcionario del TSC.
Para no arruinar le proceso, mejía dijo –únicamente- que “se habla hasta de directores generales, pero no voy a dar nombres”.
El domingo pasado se informó que la Misión de Apoyo contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) apoyará en el proceso de certificación.