Tegucigalpa, Honduras.
El Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), no logra disminuir sus deudas a corto plazo y de acuerdo a informes, entre los meses de enero-febrero de 2017, los compromisos de la institución sumaron un poco más de mil millones de lempiras.
En dos meses, el endeudamiento del SANAA creció en aproximadamente 27 millones de lempiras, según se hace constar en el balance financiero del ente autónomo.
Los préstamos de corto plazo adquiridos por la institución se cuantifican en 39 millones de lempiras mientras los documentos y cuentas por pagar llegan a 952 millones. Un monto adicional de 11 millones de lempiras corresponde a diversas obligaciones contraídas.
Los préstamos de largo plazo ascienden a 20 mil 440 millones de lempiras.
Al 28 de febrero, los activos circulantes crecieron en 18 millones de lempiras. Pasaron de 1,205 millones de lempiras en diciembre de 2016 a 1,224 en el primer bimestre de 2017.
Esta cifra se refiere al dinero que la empresa tiene más o menos disponible para ser utilizado y que está compuesto por los fondos existentes en caja, los depositados en bancos y las deudas de los clientes.
El SANAA tiene una cartera de cuentas por cobrar equivalente a un poco más de mil millones de lempiras y una cantidad de 7,600 millones en activos fijos que incluyen bienes, instalaciones y proyectos en proceso de la empresa estatal.
Entre tanto, los activos diferidos, que son aquéllos gastos pagados por anticipado, se elevan a 215 millones de lempiras, tal como lo refleja el estado financiero hasta febrero de este año.
Este balance indica que el SANAA tiene un total de activos por nueve mil 119 millones de lempiras.