La presencia de Diego Armando Maradona en los medios de comunicación es una constante en los últimos 30 años, pero pocas veces es por las llamadas “buenas” noticias o méritos deportivos.
Su vida se ha convertido en un cúmulo de dimes y diretes con personajes del fútbol, su pareja y ex parejas, hijos reconocidos y reconocidos a la fuerza, deudas con el fisco italiano y hasta videos violencia doméstica.
Sus años de gloria de fútbol pasaron a la historia y para algunos se ha convertido en una especie de caricatura de sí mismo.
Esta semana ha sido de nuevo protagonista, primero por la ruptura con su novia (ella no quiso acompañarlo de vuelta a Dubai), y luego porque según al diario argentino MUY, el ex pibe de oro tiene el deseo de casarse con ella, Rocío Oliva (31 años menos que él) y quiere que ese amor lo selle nada más y nada menos que el Papa Francisco Bergoglio.
El Papa argentino es sin duda un Pontífice revolucionario, ha sido inclusivo dando la bienvenida a la iglesia católica a los divorciados, madres solteras y homosexuales, pero ¿aceptará el reto de casar al Pelusa?
De acuerdo al diario El Mundo de España, que replicó la información del rotativo MUY, fuentes cercanas al ex seleccionador argentino, dan por hecho que la boda que se celebraría el 13 de diciembre de este año y será presidida por el Papa argentino, pero para que esto ocurra la boda eclesiástica de Maradona con Claudia Villafañe (madre de Dalma y Gianina) tendría que ser anulado, un proceso que usualmente no tarda pocos meses.
Maradona anunció a través de las redes sociales que se casaría este año y de acuerdo a MUY esta solicitud le fue hecha al Papa cuando se celebró el Partido por la Paz en Roma, durante abril de este año.
Maradona ha tenido muchos altibajos con su actual pareja, ella lo acusó de violento y él la tildó de ladrona, pero como algunos dicen que en el amor todo se vale (habría que definirse si la ruptura es definitiva o no), es probable que sí seamos testigos de una boda del campeón del mundo en México 1986 oficiada por el Papa Francisco. A la postre el dogma cristiano nos habla de misericordia, perdón e inclusión.